Cinco son las divisiones turísticas de la provincia de Ávila.
Al norte se encuentra La Moraña, una extensa llanura típicamente castellana salpicada de pequeñas poblaciones. Limita con la provincia de Valladolid y sus principales núcleos urbanos son Arévalo y Madrigal de las Altas Torres.
Ocupando el centro de la provincia, el Valle Ámbles y Sierra de Ávila, zona de ricos pastizales en el valle que han permitido el desarrollo de una industria cárnica de excelente calidad. Sus principales núcleos urbanos son Ávila, Muñana y Solosancho.
Al oeste encontramos los Valles del Tormes y Corneja, que incluyen la cara norte de la Sierra de Gredos declarada parque natural en 1996. Una zona ideal para los amantes de la naturaleza el senderismo, montañismo, turismo activo y el avistamiento de flora y fauna. Sus principales núcleos urbanos son El Barco de Ávila, Piedrahíta y Hoyos del Espino.
Al este, limitado con Madrid, el Valle del Alberche y Tierra de Pinares, cuna de muchos de los vinos de la provincia y paraiso natural en su Reserva del Valle de Iruelas. Dispone de múltiples zonas de baño y playas fluviales y una extensa oferta de actividades de ocio al aire libre y turismo activo. Sus principales núcleos urbanos son Cebreros, El Tiemblo y Navaluenga.
En el sur hallamos el precioso Valle del Tiétar, que disfruta de un microclima excepcionalmente cálido, protegido por la cara sur de la Sierra de Gredos. Visitar los cerezos en flor de El Arenal y El Hornillo, las espectaculares Cuevas del Águila cerca de Arenas de San Pedro, las bellísimas Cinco Villas en la bajada del Puerto del Pico... disfrutando además de su excelente gastronomía, es una experiencia inolvidable. Sus principales núcleos urbanos son Arenas de San Pedro, Sotillo de la Adrada y Candeleda.