Santa María del Arroyo es un pueblo situado en el Valle Amblés, en el piedemonte de la sierra de Ávila, a 1.131 metros de altitud.
Se accede a él desde la carretera N110 y dista 22 km de Ávila y 131 km de Madrid.
En su término municipal hay restos de asentamientos humanos de época prehistórica. Algunos yacimientos calcolíticos están datados entre los 4400 y 2600 años a.C.: entre otros, los Hitueros, situado en el entorno de un promontorio granítico, con restos de dos cabañas y gran cantidad de materiales con punzones, cucharas y puntas de flechas; el Boquerón; la casa de la Viña y los molinos del Hocino.
Hay también indicios de la existencia de una villa romana en el camino del Carrascal, donde se encontraron tumbas y restos de vasijas, y en la plaza se conserva un verraco de procedencia desconocida.
Aldea de origen medieval, citada documentalmente por primera vez en 1250, fue siempre lugar de realengo.
Hasta el siglo XIX su concejo dependía de la jurisdicción del concejo de Ávila y formaba parte del sexmo de San Pedro, uno de los siete sexmos en que, a efectos políticos, administrativos y fiscales, estuvo dividida la tierra de Ávila hasta su disolución.
En la actualidad, el casco urbano, dominado por la iglesia de la Asunción, que se alza sobre un promontorio, conserva algunas casas de arquitectura tradicional que presentan tejadillo en su fachada.