El cultivo del melocotón en la zona del Alberche es antiguo y desde hace muchos años sus frutos son apreciados por su calidad. En principio se cultivaban unos melocotones pequeños de pulpa blanca y perfumada, principalmente Los llamados melocotón común y melocotón nuez. Se obtenían pequeñas producciones y muy poco uniformes, destinados principalmente al consumo familiar, si bien los excedentes que llegaban a ciertos mercados eran altamente valorados.
Con el tiempo, se introdujeron nuevas variedades de árboles y nuevos criterios de cultivo, como La utilización de abonos adecuados y empleo de modernas labores frutícolas, lo que unido a las excelentes condiciones de la tierra han contribuido a la obtención de un producto más uniforme, en cuanto al tamaño, más coloreado, de maduración más escalonada y mayor resistencia al transporte. Esto ha permitido poner en el mercado un melocotón competitivo que mantiene sin embargo Las características de exquisitez que dieran la fama al tradicional melocotón del Alberche.
Las horas de insolación de los veranos calurosos y las de frío sufridas durante el invierno inciden en la excelencia del fruto.
Las variedades más frecuentes en el Valle del Alberche son: