El el principal monumento de Muñomer del Peco, del siglo XVI, construida en mampostería y ladrillo.
Tiene cabecera poligonal y espadaña a los pies del templo.
En el interior destaca el retablo mayor, dedicado a la Virgen y atribuido a Blas Hernández, discípulo de Vasco de la Zarza.
De un cuerpo sobre banco y tres calles, la central flanqueada por entrecalles con hornacinas que acogen a los Apóstoles, a los santos Domingo y Francisco y a las santas Águeda y Catalina.
En la calle central se encuentran las tallas de la Crucifixión y el grupo de la Virgen y el Niño.
En las laterales, tablas sobre la Epifanía y la Circuncisión en un lado y la Asunción y San Sebastián, en otro.