La iglesia de Nuestra Señora de la Purificación, en que interviene Diego Martín de Vandadas, fue construida en el siglo XVI.
Tiene cabecera poligonal, una sola nave y una espadaña con dos vanos para las campanas.
Se accede al interior por una portada protegida por un portalillo formado por cuatro columnas de piedra.
En el interior destacan un retablo barroco presidido por la imagen de Nuestra Señora, un púlpito de piedra, una tribuna, un altar en que se encuentra la imagen de la Virgen de las Candelas y un artesonado de madera de par y nudillo.