Se encuentran en lo alto del monte, junto a tumbas rupestres antropomorfas de época altomedieval.
Entre Navarrevisca y Serranillos, sale un antiguo camino que ha sido asfaltado para facilitar la llegada hasta un repetidor de televisión. El camino discurre paralelo a la garganta entre pastizales de montaña, prados cerrados y grandes retamas que en los meses de mayo y junio lo llenan todo de color.
Junto al camino, en lo alto de la sierra, en un hermoso paraje, a 1.700 metros de altitud, se encuentran los restos de la primitiva ermita de San Pedro, cimentada sobre la roca madre, con bóveda de sillares perfectamente trabados y un sólido muro que ha soportado bien el empuje de la bóveda y ha permitido que buena parte de la estructura llegue hasta nuestros días.
En sus inmediaciones se encuentran varias tumbas rupestres antropomorfas de época altomedieval.