Es una cruz apuntada, y por tanto de estilo gótico, de las mejor conservadas en la comarca de la Sierra de Gredos.
Está decorada por largas series de bolas típicas del siglo XV y la ménsula que sobresale parecer ser que en la antigüedad debió acoger alguna imagen que el tiempo ha perdido. Las doce esferas a cada lado de su eje mayor evocan a los doce apóstoles.
Con anterioridad esta cruz no estuvo aquí, sino unos metros enfrente cruzada la carretera donde se encontraba el antiguo cementerio de Hoyos del Espino. Hace años dicho cementerio fue desmantelado y la cruz movida de sitio.