Protagonistas en el río
No hay duda de que los peces son los grandes indicadores biológicos de los ríos.
El Tormes con sus aguas puras, frías y cristalinas aloja a unas cuantas especies, algunas con diferencias notables sobre otros cauces. La gran protagonista es la trucha, que encuentra en estas aguas un biotopo ideal.
La joya del agua
La trucha común del Tormes es muy apreciada por los pescadores, pero también por los naturalistas debido a su belleza. Sus característicos puntos rojos rodeados de blanco la hacen inconfundible. Además hay que destacar de forma especial la de su afluente el Corneja, cuya calidad genética es excelente.

El Barbo, enorme luchador
Uno de los peces endémicos de mayor tamaño que podemos encontrar en el Tormes, es el barbo, llamado así por sus apéndices llamados barbillones que desarrolla en los labios. En primavera remonta los cauces en busca de zonas con fondos de grava. A veces resulta todo un espectáculo contemplar esos movimientos.

Los más pequeños
Aunque la trucha y el barbo pueden ser espectaculares, las aguas del Tormes también sostienen algunos peces igual de interesantes como son los minúsculos cobítidos o una de las joyas de nuestra provincia, la bermejuela.
Otros habitantes del río
Además de los peces, el río se enriquece con otro tipo de inquilinos, algunos tan curiosos y beneficiosos como las almejas de agua dulce, otros mucho más nocivos como el cangrejo señal que está diezmando nuestras aguas.
Diversas aves asociadas al agua aprovechan también el Tormes como espacio donde alimentarse y subsistir.